La sanidad privada ha sido objeto de una serie de prejuicios totalmente equivocados que han impedido su justa valoración en España. La crisis económica ha obligado a introducir ciertos cambios en la asistencia sanitaria pública ante el descontento de la población. Por eso, muchos ciudadanos han empezado a informarse bien acerca de las ventajas que proporcionan los seguros médicos.
De todos modos, todavía siguen imperando algunas ideas erróneas sobre la sanidad privada que a continuación vamos a desmentir con argumentos.
Sobre la sanidad privada se ha dicho…
- «Los servicios privados de salud se basan en el afán de lucro y no pueden considerarse públicos»: a pesar de que resulte sencillo usar este razonamiento, los servicios que prestan no dejan de ser públicos y de estar orientados a la salud pública. Una prueba de ello es que en los últimos años ha crecido el número de ciudadanos con seguro de salud.
- «La privatización de la asistencia sanitaria disminuye la calidad asistencial del Sistema Nacional de Salud»: lo cierto es que la sanidad privada impulsa la mejora de la calidad del servicio sanitario al aliviar la carga de la sanidad pública. En España, los 7,6 millones de usuarios de los servicios privados de salud que no recurren a la sanidad pública contribuyen a bajar la presión asistencial, particularmente en lo referido a listas de espera y tiempos de demora.
- «En tiempos de paro y depresión económica, la salud privada se torna inaccesible para el ciudadano»: recientes estudios indican que con todo y la situación económica, el gasto sanitario ha crecido. Los ciudadanos han optado por el seguro de salud, tal como lo refleja el hecho de que las pólizas han aumentado 1,8% en los últimos años. Esto significa una proporción de dos por cada diez ciudadanos con este seguro.
- «La salud privada se beneficia del empeoramiento de la sanidad pública»: esto es falso en la medida en que la actividad privada reduce la presión que sufre el sector público. Una persona con seguro médico no acude a un centro público, hecho que mejora la fluidez de la atención en los hospitales y ambulatorios, ahorrándole gastos al Estado.
- «Los servicios privados de salud, más no la sanidad pública, deben ser objeto de reformas y regulaciones»: al contrario, autoridades con amplia trayectoria en el sector salud han instado recientemente a poner límites a la sanidad pública como medida orientada a lograr la equidad en la prestación de servicios de salud.
- «Ante el aumento de la inmigración, privatizar la salud favorece la exclusión de estas comunidades»: totalmente falso ya que los prestadores privados de servicios de salud favorecen más a los inmigrantes que la sanidad pública. En algunos casos, los prestadores privados ofrecen ofertas hasta 30% más económicas que los importes que pretende cobrar el Estado.
En definitiva…
Superar los prejuicios que pesan sobre la sanidad privada es importante para observar que el seguro médico privado se hace cada vez más necesario para encarar la demanda creciente de servicios de salud. Además, descarta la idea de que invertir en salud y bienestar es un lujo, sólo al alcance de los bolsillos más pudientes. Encuentra tu mejor seguro de salud privado en nuestro buscador personalizado.